¿Por qué es importante llevar una alimentación saludable durante el embarazo?
A lo largo del embarazo, tu bebé crece y se desarrolla; por eso, es recomendable seguir una dieta saludable incorporando los nutrientes necesarios para que crezca fuerte y sano.
La mayoría de las mujeres aumentan entre 11,5 a 16 kilogramos durante el embarazo, que se suele distribuir de la siguiente manera: de 1 a 2 kilogramos durante el primer trimestre, y luego de a 0,5 kilogramos por semana durante el resto del embarazo.
Recomendamos consumir:
Frutas y verduras – este grupo aporta vitaminas, minerales y antioxidantes que ayudan a prevenir enfermedades, envejecimiento prematuro y enfermedades degenerativas.
En los diferentes tipos de verduras se consigue la variedad de nutrientes además, su absorción es mayor si se consumen crudas siempre y cuando estén bien lavadas.*
*Podés utilizar agua con lavandina para la desinfección y luego de 10 minutos sumergidas realizar un enjuagado con abundante agua potable.
Lácteos – el principal aporte es el calcio, fundamental para la formación de huesos, dientes además, tienen contenido de proteínas y vitamina A.
Se pueden comer en cualquier momento del día ya que sus versiones son variadas. Además también se puede utilizar leche para las cocciones de cereales.
Carnes y huevos – Las carnes con una fuente de proteína de muy buena calidad, aportan hierro, zinc, fósforos y vitaminas. A su vez, el huevo también aporta grasas y colesterol.
Es importante alterar el consumo de los distintos tipos de carne en la semana, y disminuir la ingesta de fiambre embutidos y achuras porque contienen alto contenido de grasas saturadas y colesterol.
Grasas y aceite – Son la fuente de energía más concentrada, transportan vitaminas y aportan al organismo los ácidos grasos esenciales. en los aceites vegetales, las semillas y frutas secas disminuyen la concentración de colesterol en sangre.
Es recomendable que el consumo de frituras o salteados no sea más de 1 o 2 veces por semana
Y no te olvides de:
tomar abundante agua (entre 2 y 3 litros por día).
Hacer 4 comidas por día (desayuno, almuerzo, merienda y cena).
Evitar el consumo de pescado crudo (por ejemplo, en el sushi), carnes crudas o poco cocidas y lácteos no pasteurizados.